All we are is dust in the wind

All we are is dust in the wind

A NADIE PRETENDO COMUNICAR CERTEZA ALGUNA. NO LAS TENGO.

A lo sumo alguna conjetura, siempre desde la incertidumbre.

Hace años lo aprendí de Albert Camus. Más tarde, unas palabras de Michel Foucault volvieron a recordármelo: No hay que dejarse seducir por las disyunciones, ni aceptar acríticamente los términos del dilema: o bien se está a favor, o bien se está en contra. Uno puede estar enfrente y de pie.

"La idea de que todo escritor escribe forzosamente sobre sí mismo y se retrata en sus libros es uno de los infantilismos que el romanticismo nos legó...las obras de un hombre trazan a menudo la historia de sus nostalgias o de sus tentaciones, casi nunca su propia historia" (Albert Camus)

http://books.google.es/books?id=GiroehozztMC&pg=PA25&source=gbs_toc_r&cad=4#

PARA QUÉ SIRVE LA FILOSOFÍA. Paco Fernández.


martes, 31 de agosto de 2010

De cómo Badiou afirma que el "comunismo" ha muerto dos veces y, sin embargo, no lo ha hecho. Paradoja que el lector descubre cuando percibe los diferentes significados que el autor atribuye al término. ¿Un ejemplo de platonismo contemporáneo?


El libro es de Alain Badiou y lleva por título De un desastre oscuro. El primer capítulo se llama ¿"La'muerte del comunismo'"? 

¿Quienes son los comunistas? Badiou responde: "...nosotros, los comunistas...los revolucionarios...fieles a la revolución de Octubre del 17. Primer significado: "COMUNISMO" es un concepto trans-temporal, eterno, platónico, históricamente ahistórico, que se identifica con, y cito al autor, "la subjetividad rebelde" y adquiere su estatus de "acontecimiento" con la revolución. Así entendido, el comunismo no solamente no ha muerto, sino que no puede morir; ni siquiera cuando el término sea arrastrado, y cito al autor, "a la sangre y al lodo". Además, señala que es un pensamiento -y la condición de poder seguir pensando- anterior e irreductible a sus figuras institucionales. Lo que ha muerto es, precisamente, una de esas figuras: el comunismo soviético: Segundo significado y segunda muerte históricamente fechada. ¿Segunda muerte? Sí, la primera ocurrió, tercer significado, cuando hablar de un "nosotros, los comunistas" -que sustentaba un pensamiento cuyos ideales eran la comunidad universal, el fin de las clases y el ideal emancipatorio- ya no tenía sentido. Fue ésta la primera muerte o muerte política del comunismo. También susceptible de ser fechada: las prescripciones leninistas que cesaron de exponer al comunismo a su eternidad en el tiempo. La muerte política del ideal y la muerte histórica de la institución no significan la muerte de la IDEA. La subjetividad política y la objetividad histórica no significan que no siga vivo, y cito al autor, "el semáforo del comunismo". Se pregunta Badiou: "Se habrá apagado todo...porque una tiranía mediocre decidió pronunciar ella misma que estaba muerta? Esto es lo que no creo en absoluto." Afirmar la muerte de la IDEA, concluye el autor, significa identificar la historia política con la historia de los ESTADOS, y dejar el camino libre al regimen liberal pseudo-democrático que afirma el caracter Estatal de cualquier forma de política. Si murió el comunismo estatal soviético -encarnación absurda de la IDEA en su forma estalinista- fue porque ya había muerto la militancia política que sustentaba el NOSOTROS, LOS COMUNISTAS. La conclusión de Badiou es clara: la muerte del comunismo, la identificación de política y estatalidad, deja el camino libre al Estado-partidos o capital-parlamentarismo. Es decir, la negación de los ideales que representa la IDEA comunista eternamente. 


jueves, 26 de agosto de 2010

DESEO (HEGEL IN PROGRESS)




El animal desea cosas, el cuerpo de otro, por ejemplo. El hombre y/o la mujer desean el deseo del otro o de la otra, es decir, SER RECONOCIDOS. Este reconocimiento es ajeno a cualquier forma de reciprocidad o simetría. Exige el sometimiento. Y lo mismo desea el otro o la otra. Las relaciones afectivas no son entonces sino una modalidad de una RELACIÓN más general que comienza con el enfrentamiento de las conciencias deseantes: lucha, agón, conflicto. Esta lucha tiene un final que no es sino un comienzo dialéctico: la “rendición” de uno de las conciencias y, por tanto, su sometimiento a la conciencia victoriosa, pues el temor del vencido fue más fuerte que su deseo. La relación dialéctica define el juego de las identidades: amo y esclavo/amado y amante. El amo deseará el reconocimiento del esclavo que por su condición sufre un deficit de humanidad que el amo no soporta (imposibilidad de satisfacer el deseo). El esclavo comenzará a humanizarse en su cotidiana dedicación al amo (imposibilidad de renunciar al deseo). La relación dialéctica continua en el entramado de deseos.

miércoles, 25 de agosto de 2010

 Sugiero, por si a alguien le apetece comentarlo, el siguiente fragmento del libro de Zizek mencionado en una entrada anterior (p. 286)

"...La dura lección del sexo virtual no es sólo que estemos privados del sexo real, del contacto intenso con el cuerpo de otra persona, que es sustituido por un estímulo generado por medio de imágenes sin sustancia que nos bombardean desde la pantalla. Antes bien, lo esencial es el descubrimiento mucho más desagradable de que no ha habido nunca "sexo real": el sexo era ya siempre un juego apoyado en un escenario fantasmático masturbatorio. La idea común de masturbación es la de un "acto sexual con un partenaire imaginario". El "no hay relación sexual" de Lacan puede ser interpretado como una inversión de esta noción común: ¿Y si el "sexo real" no fuera más que masturbación con un compañero real? ¿Y si, incluso cuando estoy fornicando con una persona real, lo que en última instancia sustenta mi goce no es mi pareja real, sino los fantasmas secretos que convoco en tal acto?"

Aforema pseudofreudiano




La realidad 
es la terapia recomendada 
para todos aquellos 
que no puedan soportar sus 
sueños

lunes, 23 de agosto de 2010

El lazo melancólico

A mis amigos...


Algunos de mis amigos de izquierdas siguen mantenido un cierto lazo melancólico-ideológico con una revolución imposible, el cual les permite afirmar su fidelidad a las antiguas raíces marxistas emancipadoras y, al mismo tiempo, participar plenamente en el globalizado juego del capitalismo. Mis amigos melancólicos no renuncian a SU revolución. Sin embargo, la niegan en cada uno de sus actos y de sus gestos, perfectamente instalados en una sociedad a la que desprecian pero en la que viven y trabajan. No renuncian y no aceptan que es el deseo de revolución lo que debe ser problematizado, precisamente porque, en definitiva, ellos, más que desear la revolución, desean el deseo de revolución que han perdido. Ni siquiera han iniciado el DUELO. El lugar de éste fue ocupado por la MELANCOLÍA. Y ahí siguen. Es lo que tienen los lazos melancólicos: no permiten distinguir entre la FALTA y la AUSENCIA.

Paco f. (Sin DNI ideológico. Sospechoso, dicen algunos, de traidor impenitente a la verdad eterna y contrarrevolucionario. Nominalista metodológico y amante del carajillo de ron. AnarcoVisceral y alérgico a los principios inmutables y a las leyes de la historia. To be continued.)

Aforema orto-fóbico



No es la NEGACIÓN o el rechazo
aquello que socava el DESEO
que se inmola extático
en el altar de la INDIFERENCIA


And the fever when I'm beside her 
Desire
Desire
And the fever, getting hihger
Desire
Desire
 
(U2   DESIRE)


Las ensoñaciones ideológicas de la/s Izquierda/s

La izquierda o las ensoñaciones de unos paseantes organizados muy bien instalados, no allí sino aquí. La izquierda comprometida consigo misma, con sus ensoñaciones dogmáticas que le permiten ser AQUÍ (democracias) y soñar con ALLÁ (DICTADURAS)

El socialismo de la izquierda académica occidental -y no menos el de actores, artistas, poetas, músicos y representantes de malas y buenas artes- se caracteriza, básicamente, no por su actividad sino por ser el epítome de una de las formas más elementales de la experiencia pasiva. Perfectamente instalados en el way of life de las democracias liberales, los "puros entre los puros", que diría un buen amigo mío, se permiten desarrollar sus carreras académicas en Occidente -bien remuneradas, por otra parte- mientras proyectan sobre los OTROS (Cuba, por ejemplo) sus "ensoñaciones ideológicas"; y así, viven su ideología a través de otro; y así, se protegen de sus propias quimeras mientras se indignan cuando los OTROS inician cualquier movimiento que les aproxime a cualquier forma de capitalismo liberal.

domingo, 22 de agosto de 2010

Una imagen fruto de mi visita a The Cotswolds (In the Heart of England)

Shoá, Totalitarismo y Bondad de los regímenes políticos.

Propongo tres textos susceptibles de crítica a fin de volver a poner este blog en movimiento tras el "coma" vacacional.


Texto 1. Pertenece al libro de Idith Zertal La nación y la muerte. La Shoá en el discurso y la política de Israel (Gredos, 2010).


"A través de Auschwitz -que se ha convertido en la principal referencia de Israel ante un mundo sistemáticamente definido como antisemita y hostil-, Israel se dota de un aura de sacralidad, la de la víctima final, y se muestra impermeable a la crítica y al diálogo racional con el resto de la comunidad internacional. Además, mientras Israel insiste con razón en el carácter único del exterminio de los judíos en Europa, incluso en una época de genocidios e inmensas catástrofes humanas, el uso sistemático y descontextualiado que ha hecho de ello el Estado de Israel es uno de los principales ejemplos de devaluación de la extraordinaria relevancia y magnitud de la Shoá." (p. 26)


Texto 2. En la página 13 del libro ¿Quién dijo totalitarismo? de Slavoj Zizek encontramos que:


" A lo largo de toda su trayectoria, el "totalitarismo" (el término) ha sido una noción ideológica que ha apuntalado la compleja operación de "inhibir los radicales libres", de garantizar la hegemonía demoliberal; ha permitido descalificar la crítica de izquierda a la democracia liberal como el revés, el "gemelo" de las dictaduras fascistas de derechas...Desde el momento en que uno acepta la noción de "totalitarismo" queda inserto firmemente en el horizonte democrático-liberal...(el totalitarismo) es una especie de subterfugio que, en lugar de permitirnos pensar, y obligarnos a adquirir una nueva visión de la realidad histórica que describe, nos descarga del deber de pensar e, incluso, nos impide activamente que pensemos."


Y por último (de momento), un fragmento del libro de Pio Moa Franco para antifranquistas

      "...el mismo nacionalsocialismo de Hitler tuvo su parte buena: acabo con el paro en Alemania, devolvió a la población la confianza en sí misma, acabó con la inseguridad ciudadana y los choques callejeros característicos de la época anterior, etc., y con todo ello se ganó el apoyo de la moyoría del pueblo...(p. 223)