Ella dijo: me voy. Él contestó: ¿a dónde?, e inmediatamente, sin vacilar, le susurró al oído: voy
contigo. Sus cuerpos se fundieron en un mismo gemido saturado de tiempo denso, el mismo que
anuncia la inminencia de una recíproca convulsión o el éxtasis diferido y
prolongado. Otros lo llaman orgasmo.
1976: Historia de la banda argentina Alma y Vida
-
Contenido de esta entrada:
Introducción
Comienzos y primer álbum
Resto de álbumes
Separación y regresos
Portada de su quinto álbum
Introducción
El r...
Hace 21 horas