All we are is dust in the wind

All we are is dust in the wind

A NADIE PRETENDO COMUNICAR CERTEZA ALGUNA. NO LAS TENGO.

A lo sumo alguna conjetura, siempre desde la incertidumbre.

Hace años lo aprendí de Albert Camus. Más tarde, unas palabras de Michel Foucault volvieron a recordármelo: No hay que dejarse seducir por las disyunciones, ni aceptar acríticamente los términos del dilema: o bien se está a favor, o bien se está en contra. Uno puede estar enfrente y de pie.

"La idea de que todo escritor escribe forzosamente sobre sí mismo y se retrata en sus libros es uno de los infantilismos que el romanticismo nos legó...las obras de un hombre trazan a menudo la historia de sus nostalgias o de sus tentaciones, casi nunca su propia historia" (Albert Camus)

http://books.google.es/books?id=GiroehozztMC&pg=PA25&source=gbs_toc_r&cad=4#

PARA QUÉ SIRVE LA FILOSOFÍA. Paco Fernández.


jueves, 28 de junio de 2012

Estupidia 1 23,32



Cultivar la lectura y la escritura nos permite contrarrestar el efecto que sobre el mundo tiene la estupidez humana, la propia y la ajena. Leer y escribir son dos buenos antídotos contra los principios que rigen la circulación de la necedad, a saber: 

• El principio pascaliano: la estupidez se encuentra en todo lugar y en todo ser y se proyecta con igual o mayor intensidad en todas direcciones. 
• El postulado de la conservación de la estupidez: su nivel se mantiene constante, ni se crea ni se destruye, se desplaza. 
• El principio antropológico o principio de razón suficiente: siempre encontramos razones para no considerarnos unos estúpidos. Los estúpidos siempre son los otros. 
 • Principio de inercia o constancia: la estupidez se mantiene constante en un individuo o grupo si no interviene ninguna fuerza que la desplace. 
• El principio socrático: conoce el grado de estupidez que puedes llegar a soportar, o lo que es lo mismo, cuídate de tu propia estupidez y de la ajena. Estos cinco principios se cierran en dos: 
• El principio de acción y reacción: A toda fuerza estúpida hay que oponerse con la misma intensidad y en la misma dirección, aunque en sentido contrario. 
• El principio volitivo: resistirse a la estupidez es apostar por no ser ni un apocalíptico-zombie ni un integrado-fanático. 


Antonio Campillo, sobre biopolítica, totalitarismo y globalización

Enlace al vídeo-conferencia.

http://tv.um.es/video?id=8431&idioma=es