Fue el azar, o no, el que me llevó esa noche hasta el hombre-orquesta. Le ofrecí un cigarrillo y nos hicimos unas fotos.
Fue el azar, en Kaunas, Lituania, el que hizo posible este encuentro y esta imagen.
1976: Carpe diem, viendo pasar el tiempo
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Contenido de esta entrada:
Introducción
En regardant passer le temps
Portada original del álbum
Introducción
En este artículo traemos los comienzos y p...
Hace 13 horas
1 comentario:
Desde luego es un placer ver en la foto el disfrute de este individuo y en realidad seguro, será mayor, no lo dudo ni un instatante.
Luigi, pasate por mi blog aver que te parece ;D
Saludos.
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