All we are is dust in the wind

All we are is dust in the wind

A NADIE PRETENDO COMUNICAR CERTEZA ALGUNA. NO LAS TENGO.

A lo sumo alguna conjetura, siempre desde la incertidumbre.

Hace años lo aprendí de Albert Camus. Más tarde, unas palabras de Michel Foucault volvieron a recordármelo: No hay que dejarse seducir por las disyunciones, ni aceptar acríticamente los términos del dilema: o bien se está a favor, o bien se está en contra. Uno puede estar enfrente y de pie.

"La idea de que todo escritor escribe forzosamente sobre sí mismo y se retrata en sus libros es uno de los infantilismos que el romanticismo nos legó...las obras de un hombre trazan a menudo la historia de sus nostalgias o de sus tentaciones, casi nunca su propia historia" (Albert Camus)

http://books.google.es/books?id=GiroehozztMC&pg=PA25&source=gbs_toc_r&cad=4#

PARA QUÉ SIRVE LA FILOSOFÍA. Paco Fernández.


domingo, 1 de noviembre de 2020

A Javier Reverte, que también escribió sobre Albert Camus.

 Releo EL HOMBRE DE LAS DOS PATRIAS de Javier Reverte. Un relato que transita una de las patrias de Albert Camus: Argelia. Concretamente las dos ciudades en las que vivió y que fueron protagonistas de sus relatos más célebres: Argel, donde transcurrre la anodina vida de Meursault, y Oran, donde Rieux se juega la vida luchando contra la peste. La otra, fue Francia, o mejor, la lengua francesa. Pero aquí no acaba el asunto. Sin pretender corregir al maestro narrador de tantos viajes tan bien descritos, yo hablaría de una tercera patria del autor de EL EXTRANJERO: España.

 Dice Reverte: "Camus era un francés, con unas gotas de sangre española, nacido en territorio argelino, un pied-noir..".

 Tres patrias pero una única idiosincrasia. La que Camus llamó MEDITERRANEIDAD. La aludida, precisamente, por Reverte en su road movie, en su libro: una forma de vida que se nutre de la tensión entre un amor desmesurado por la vida y el dolor de existir, entre la experiencia de la mortalidad y la certeza de que la vida merece la pena ser vivida: "No hay amor a la vida sin desesperación de vivr", dice Camus.