All we are is dust in the wind

All we are is dust in the wind

A NADIE PRETENDO COMUNICAR CERTEZA ALGUNA. NO LAS TENGO.

A lo sumo alguna conjetura, siempre desde la incertidumbre.

Hace años lo aprendí de Albert Camus. Más tarde, unas palabras de Michel Foucault volvieron a recordármelo: No hay que dejarse seducir por las disyunciones, ni aceptar acríticamente los términos del dilema: o bien se está a favor, o bien se está en contra. Uno puede estar enfrente y de pie.

"La idea de que todo escritor escribe forzosamente sobre sí mismo y se retrata en sus libros es uno de los infantilismos que el romanticismo nos legó...las obras de un hombre trazan a menudo la historia de sus nostalgias o de sus tentaciones, casi nunca su propia historia" (Albert Camus)

http://books.google.es/books?id=GiroehozztMC&pg=PA25&source=gbs_toc_r&cad=4#

PARA QUÉ SIRVE LA FILOSOFÍA. Paco Fernández.


miércoles, 27 de octubre de 2010

MANIFESTACIONES ANTISEMITAS CONTEMPORÁNEAS.


Rescato una columna de Antonio Gala en El Mundo (05-02-09) como ejemplo de manifestación antisemita. En negro las palabras de gala, en color rojo las mías.

DEBE estar claro: que se hayan cometido contra un pueblo delitos genocidas o antihumanos, no le autoriza a cometerlos él.

El Sr. Gala no podría citar ninguno de esos delitos genocidas o antihumanos que ha cometido el pueblo al que se refiere. Por una razón evidente: no existen. Ergo, el Sr. Gala miente.

El sionismo equivale a un fundamentalismo y es, por tanto, ciego y vengativo.

El Sr. Gala no tiene ni la más mínima idea de lo que es el sionismo; o la tiene, pero le interesa distorsionar y falsificar su significado. El sionismo es un movimiento de liberación nacional de un pueblo, el judío, uno de los grupos humanos más oprimidos, discriminados y perseguidos de la historia.

Que no se escuden quienes usan Israel (no todos) en lo que contra ellos se realizó. Como compensación, se arrebató a otro pueblo su geografía -sólo parte- para crear o recrear una nación preferida de Dios.

Malintencionado o ignorante, el Sr. Gala confunde los términos: israel, judio y sionista. ¿A quién arrebató su geografía? ¿Qué Estado tuvo que ser conquistado para arrebatarle su “geografía”? ¿Qué tiene que ver Dios en todo esto? El Sr. Gala debería estudiar algo de historia y aprender cuáles fueron las motivaciones y las raíces del movimiento sionista desde Herzl hasta nuestros días. O más bien, debería escribir lo que sabe sobre la declaración Balfour, sobre la partición de las Naciones Unidas, sobre la respuesta de los árabes al plan de partición, etc. Lo sabe y, sin embargo, falsifica la historia cuando habla. Me temo que a sabiendas.

Dio mal resultado: rebrotó la codicia y el afán de extensión, el desprecio a otros pueblos y a sus vidas y a sus posesiones, y resucitó el terrorismo... Ahora no quiere convivir. Sin paz, sin límites, sin freno a la avaricia y a las falsas historias, el pueblo judío sucumbirá de nuevo. Como le sucedió en unas cuantas ocasiones: pogromos, guetos voluntarios o no, exterminios, persecuciones, expulsiones... Desde Egipto a Sefarad, desde Canaán a Sión: todas tierras prometidas. ¿No haría bien preguntándose el porqué le ocurre siempre igual? ¿O estará el resto del mundo equivocado?

El Sr. Gala justifica el terrorismo. No explica, por ejemplo, ¿por qué no se proclamó un Estado Palestino entre 1948 y 1967? Él sabe que los territorios palestinos no estuvieron durante esos años en manos de Israel. Lo sabe, pero no lo dice. ¿Ignorante o malintencionado? Y ejerce de profeta del antisemitismo: “...el pueblo judío sucumbirá de nuevo.” Y termina convirtiendo a las víctimas en culpables. Las dos últimas cuestiones son un ejemplo claro, no de ignorancia, sino de bajeza y ruindad moral.  

Parece que la sensibilidad del escritor se subyuga o rinde ante los prejuicios. ¿O no son prejuicios?